«Los gatos saben por instinto la hora exacta a la que van a despertar sus amos, y los despiertan diez minutos antes». Si tienes un gato en casa, seguramente hayas cambiado el ¡Ring, ring! por el ¡Miau, miau! Y es que los gatos son animales de rutinas, que no entienden de festivos ni de fin de semana. Si tienen hambre, nos despiertan, si se encuentran mal, nos despiertan, si se aburren, nos despiertan. 

En nuestro caso, Mini duerme fuera de la habitación, por lo que cuando considera que es la hora de ponerse en pie nos despierta con su insistente «miau», que va de menor a mayor volumen, como un despertador, efectivamente. Sin embargo, a Mini nunca le ha dado por rascar la puerta, una práctica habitual en algunos gatos que hay que eliminar.

Mini en la cama

Mini en la cama

Si tu gato duerme contigo, hará todo lo posible para despertarte de una manera más activa, subiéndose encima de ti, mordiéndote la nariz, lamiéndote la cara, ronroneando, etc. Todo ello con mucho amor, pero claro, a esas horas te hará la gracia justa. Si bien algunos gatitos son muy tiernos y cuidadosos para despertarnos, otros no lo son tanto.

Te estarás preguntando: ¿Y qué pasa con el fin de semana? La verdad es que Mini el fin de semana tiene algún privilegio… Cuando empieza el ¡Miau, miau!, que suelen ser las 8.30h aproximadamente, le abrimos la puerta y duerme un rato más con nosotros en la cama. Es un modo de que nosotros podamos descansar más y de que ella tenga un premio dos días por semana.

En principio, que tu gato maúlle por las mañanas no debe ser un motivo de preocupación, lo más común es que debido a su reloj interno, se esté anticipando a tu despertador, por lo que únicamente te está avisando de que ya es hora de que te levantes. Igual que él conoce tus rutinas, tú sabes cómo actúa tu gato en el día a día, por lo que sí que debes prestarle atención si maúlla a mitad de la noche o a horas poco habituales para él. Si esto ocurre, puede ser que se encuentre mal (esto sucede especialmente en la vejez debido a algunas enfermedades) y no pueda dormir, aunque también te puede despertar por tener demasiada luz durante la noche, por tener hambre o simplemente porque se aburra.

En el último de los casos, es señal de que durante el día el gato no ha tenido la suficiente actividad, por lo que te recomendamos que lo saques al exterior si es posible o que lo hagas correr con sus juguetes favoritos. Los gatos necesitan estar activos y cansarse durante el día para conciliar el sueño durante la noche. De hecho, cuando llegues a casa debes de prestarle atención e interactuar con él, ya que si solamente tienes un gato, habrá pasado gran parte del día durmiendo y necesita una sesión de juegos para sentirse feliz.

Buenos días, princesa

Buenos días, princesa

Respecto a la comida, nosotros sabemos que Mini siempre come por la noche, por lo que antes de acostarnos revisamos que tenga pienso suficiente para que no nos despierte por hambre. Además, nos encargamos de bajar las persianas para que no le moleste la luz y solemos estar un rato en el sofá con ella, por lo que cuando nos vamos a la cama, ella ya está relajada.

Es importante que tu gato no te tome el pelo, es decir, que no te despierte por capricho y que no reciba premios o cariño cada vez que te despierte demandando tu atención sin motivo justificado.

Por último, debes saber que es imposible engañar a tu gato, él sabe si estás despierto o dormido, aunque la puerta esté cerrada. Y, a pesar de todo, recuerda que tu gato es el despertador más tierno y eficaz que puedes tener. ¡Disfrútalo y despierta siempre con una sonrisa! 

¿Y tu gato cómo te despierta? ¿Hasta qué hora te deja dormir? ¡Cuéntanos tu experiencia!

Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. Más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar